Astrología para no creyentes

Hace unos días por motivo de una encuesta, tuve que escribir una definición formal de lo que yo entendía por astrología. Y si al leer esto estás pensando: «es obvio lo que es la astrología», quizás no esté tan preciso, y te invito a acompañarme y reflexionar con mi definición que sigue.

Para mí, la astrología es:
Un conjunto de símbolos y reglas (gramática) que describe posibles leyes que ordenan el surgir y cesar de las formas, incluyendo a la consciencia que percibe estos órdenes.

Sí, es más fácil decir que es un lenguaje, I know.
Pero nos quedamos cortos. Como algunos sabran, tengo alma de matemático, y me interesan las proposiciones que son completas y consistentes: no hay que agregar nada, y no hay nada que quitar. No estoy diciendo que ésta que propuse lo sea, pero es un primer intento. Y ojo, es fuerte. Dediquémosle unos instantes más a ver sus partes cruciales.


(1) La astrología no son sólo símbolos. Hay una gramática, que dice por ejemplo, que Aries viene después de Piscis y antes que Tauro, y que tiene por opuesto a Libra, etc. Esta gramática incluye también, misteriosamente, el hecho de que, dado la regularidad del curso de los planetas, cada 7 años y pico tenemos una cuadratura de Saturno, y así sucesivamente. En nuestro estudio de la astrología, a veces pasamos por alto el estudio de esta gramática fundamental: las leyes que ordenan al zodíaco mismo.

(2) Describe leyes. En realidad, «posibles leyes», y esto es lo interesante. Lidiamos siempre con un producto que nunca es final; la astrología es siempre un trabajo en proceso.

(3) Estas leyes ordenan las formas. Esto es crucial. Todo lo que percibimos con nuestros sentidos son formas, que surgen y en algún momento desaparecen. Estamos diciendo (y esto sí es un postulado fuerte) que dichas leyes ponen en relación la coexistencia de formas o su antagonismo. Por ejemplo: alguien nace en una familia, y en ese mismo período alguien muere. O alguien se muda, pero a la vez se separa. Órdenes… les decimos sincronías. ¿Por qué me tocó esta familia? ¿Por qué estos amigos, estos vecinos, estas parejas? Es decir: ¿porque fui simultáneamente ordenado en cercanía con estas otras personas?

(4) La consciencia está incluída en las leyes. Esto, señoras y señores, es quizás la diferencia fundamental que hoy nos separa de la ciencia. ¿Dónde está la consciencia? ¿Cómo podemos medirla? Parecería ser que no la encontramos «afuera», entonces los científicos no pueden usar instrumentos de medición externos para sus estadísticas y pruebas. Por ahora, vienen fritos con la cuestión, porque significa que si queremos indagar en las leyes que incluyen la variable consciencia, debemos darnos cuenta que somos nosotros mismos el instrumento de medición.

Cierro esta reflexión contándote una intuición personal, así susurrando, casi en tono de secreto: para mí… todas las leyes de la naturaleza… incluyen a la consciencia… como una de sus variables.

Escribió Leandro Liptak
Divulgador astrológico
Autor de «Curso de Astrología Espiritual»

leandroliptak: Leandro Liptak es autor de libros de desarrollo personal y conferencista internacional.