Más allá de la influencia de los astros

La astrología como campo de estudio puede resumirse en un conjunto de creencias acerca del universo y la relación del ser humano con éste. Pero como todo conjunto de creencias, dista de ser la realidad en sí.

Suelo decir que no me interesa realmente si la astrología «es cierta o no»: me interesa mucho más los descubrimientos que pueden tener lugar mientras estudio e investigo los supuestos que la astrología plantea, y eso es precisamente lo que presento en esta charla que llamo «Lo que no sabías de la Astrología»

Sin embargo, esos supuestos no son necesariamente los mismos que hace miles de años atrás. Algunas formas de ver la astrología (algunas creencias) están cayendo por sí solas hoy en día, dado que no se adaptan a la evolución de nuestro sistema de pensamiento y conocimiento actual.

Por ejemplo, nos resulta raro continuar pensando en términos de «influencia de los astros», en una época en la cual la ciencia ha progresado muchísimo: conocemos mucho más acerca del sistema solar, y los planetas y otros cuerpos del espacio se aparecen como grandes magnitudes físicas, pero no como dioses todopoderosos (una visión mucho más proclive en la antigüedad).

Pero si no se trata de influencia, ¿de qué entonces? ¿Cómo lo vemos hoy en día?

Hay una forma de pensarlo mucho más actual y que no implica conferir superpoderes a los astros, ni ubicarlos como la causa de nuestras dolencias o felicidades (es decir, los efectos). Un marco mucho más actual para estudiar la astrología propone que existe una correlación entre los sucesos de un orden macro (el sistema solar) y los de orden micro (los seres humanos). Sí, esto es muy similar a la máxima hermética «como es arriba es abajo» pero a muchos parece habérseles olvidado cuando les escuchamos hablar en términos de influencia de los astros.

Lo repito una vez más: actualmente, en astrología, no estamos hablando en términos de influencia, sino de correlación.

Esta misma correlación es la que investigamos entre otros órdenes de la realidad, por ejemplo: nuestro mundo exterior y nuestro mundo interior, nuestro mundo mental y nuestro entorno físico, o el modo de percibir a los demás y el modo de percibirnos a nosotros mismos.

La astrología se presenta entonces como un potente software (conjunto de postulados y creencias) para estudiar la interconexión entre los diversos sistemas y subsistemas de la realidad.

Con cariño,
Leandro